Por estos días en Colombia se vive y siente la pasión del fútbol con la selección Colombia en la Copa América y la llegada de Falcao al Club deportivo Millonarios, y es que a diferencia de los recalcitrantes petristas, que en otrora siempre acusaban al fútbol de ser “Pan y Circo” porque el país tenía más necesidades, siempre aplaudiré los espacios en los que los colombianos nos unimos en torno a deportes o actos en los que representan el nombre de nuestro país. Con tanta violencia y escándalos a diario, con las cifras económicas cada vez más difíciles en los hogares colombianos, cualquier espacio para la alegría, unión y amor por este país siempre será gratificante.
Lastimosamente, estas noticias de felicidad se opacan con el más reciente nombramiento del nuevo ministro de Educación del gobierno Petro, pues el redes sociales han publicado diferentes post del nuevo ministro -Daniel Rojas- en los que deja ver su abierta animadversión y hostilidad explícita a cualquier publicación que no sea de su línea ideológica.
Es evidente que a este gobierno no le ha ido bien en términos de indicadores financieros y ejecución presupuestal de las carteras ministeriales pero el nombramiento de una persona sectaria, grosera y displicente no deja bien parado a un gobierno que cada día aumenta más los indicadores de impopularidad, lo que ahonda la profunda polarización social y política en el país. Para conducir el país por buen camino es indispensable personas técnicas, con experiencia y preparación, no necesita activistas de redes sociales, rabiosos, fanáticos del gobierno. Gerenciar el país requiere de estructura y nombramientos correctos pues, es que Colombia no es una bodega donde el que más preparado está para el cargo es el que tenga mayor número de seguidores y likes.
Se equivoca una vez más el presidente, como si fuera poco la situación económica, la violencia, la crisis de salud, entre muchas otras. Presidente, gobernar al país no se trata de un equipo de fútbol donde gana el que tenga la hinchada más rabiosa, se trata de poner las personas correctas y preparadas en los cargos de las diferentes carteras, usted no necesita de barristas rabiosos que le aplaudan, necesita de personas que lo ayuden a orientar un buen camino para el bienestar de los colombianos.
Colombia merece unión y no ministros que con su actuar, dividan más a una de las naciones latinoamericanas más desiguales.
Por: Diana Andrade
