Dos atentados terroristas contra el Ejército marcaron una noche de violencia en Colombia, generando alerta en las regiones afectadas. Los ataques ocurrieron de manera simultánea en diferentes puntos del país, dejando varios heridos y daños significativos en infraestructura militar, según informes preliminares de las autoridades.
Aunque aún no se han atribuido responsabilidades oficiales, las primeras investigaciones apuntan a grupos armados ilegales activos en estas zonas. Estos hechos reflejan los desafíos persistentes en materia de seguridad y la necesidad de reforzar estrategias para proteger tanto a las fuerzas armadas como a las comunidades civiles.
El Gobierno Nacional condenó los actos y aseguró que se intensificarán los operativos en las áreas más afectadas. Se espera un pronunciamiento oficial en las próximas horas con detalles sobre las investigaciones en curso y las medidas a implementar.