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Marcela Portilla

Los Dos Primeros Años de Petro: Lo que la Ultraderecha No Admite

Una columna del Portal de Opinión

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Desde que Gustavo Petro asumió la Presidencia de Colombia, hemos vivido dos años llenos de cambios, debates acalorados y, por supuesto, un montón de teorías de la ultraderecha que nos han hecho reír (y a veces llorar). A pesar de la feroz oposición y de las constantes críticas de los sectores más fachos, el Gobierno de Petro ha logrado avances significativos que merecen ser reconocidos. Entonces, repasaremos algunos de esos logros mientras desmontamos las falacias que algunos intentan vendernos como “verdades absolutas”.

1. Reforma Agraria: La Revolución Silenciosa del Campo

Uno de los temas que siempre ha estado en la agenda de Petro es la Reforma Agraria. ¿Y qué creen? ¡Ya comenzó a implementarla! En un país donde la concentración de la tierra ha sido una de las causas históricas del conflicto, Petro ha dado pasos importantes para redistribuir la tierra de manera más equitativa. En estos dos años, su Gobierno ha logrado adjudicar tierras a miles de campesinos, apoyando la producción agrícola sostenible y promoviendo la paz rural. Claro, la ultraderecha ha llamado a esto “robarles la tierra a los terratenientes”. Pero, sinceramente, si alguien necesita más tierra para construir un campo de golf, quizás sea hora de repensar nuestras prioridades.

2. Transición Energética: Adiós, Petróleo; Hola, Sol y Viento

Petro ha sido un defensor acérrimo de la transición energética y en estos primeros dos años ha dejado claro que quiere que Colombia sea un líder en energía renovable. El Gobierno ha implementado políticas para aumentar la inversión en energías limpias, como la solar y la eólica. Aunque algunos han dicho que esto podría “dejar al país en la oscuridad”, la verdad es que el mundo se mueve hacia una energía más limpia; y es mejor subirse al tren de la sostenibilidad que quedarse en la estación de la contaminación. Petro lo entiende y, sinceramente, ¿quién no preferiría un día soleado a una nube de smog?

3. Educación para Todos: Más Allá de las Promesas

Desde el inicio de su mandato, Petro ha puesto un fuerte énfasis en la educación como motor de cambio. En sus dos primeros años, ha incrementado el presupuesto para la educación pública y ha impulsado políticas que buscan reducir la deserción escolar y mejorar la calidad educativa. Los programas de becas para estudiantes de bajos recursos y el fortalecimiento de las universidades públicas son muestras claras de este compromiso. Aunque la oposición diga que está “regalando el dinero de los contribuyentes”, invertir en educación es sembrar futuro. Y, seamos honestos, ¿quién podría estar en contra de un país más educado?

4. Salud: Un Sistema Más Inclusivo

Uno de los pilares del Gobierno de Petro ha sido la Reforma al Sistema de Salud para hacerlo más accesible e inclusivo. En estos dos años, ha trabajado para reducir las desigualdades en el acceso a servicios médicos y ha promovido la salud preventiva. A pesar de que la ultraderecha insista en que esto nos llevará al caos sanitario, los resultados muestran lo contrario: más personas accediendo a atención médica de calidad y un enfoque en la salud integral. Después de todo, ¿no es la salud un derecho fundamental y no un lujo?

5. Paz: No Solo Una Palabra, Sino Una Meta

Petro ha sido claro en su compromiso con la paz, buscando la reconciliación nacional y la implementación del Acuerdo de Paz con las FARC. Durante estos dos años, ha impulsado diálogos con diversos grupos armados y ha trabajado en programas de reintegración y desarrollo para las regiones más afectadas por el conflicto.

Aunque algunos critican su enfoque, argumentando que “no se puede dialogar con delincuentes”, Petro entiende que la paz no se logra con más guerra, sino con diálogo y oportunidades. Porque, como dicen, si quieres paz, prepárate para la empatía (y no para la guerra). Y me refiero a empatía con aquellas personas inocentes (y sus familias) que han sufrido la guerra en carne propia, empatía con nuestras Fuerzas Armadas, quienes en algunas ocasiones también ponen los muertos. En las redes sociales, los que más exigen que haya guerra son los menos dispuestos a ponerse el camuflado, las botas y el fusil para irse al monte y enfrentarse a estos grupos armados ilegales. “Casualmente”, estas exigencias vienen desde sectores de la ultraderecha.

6. Economía: Más Allá del Crecimiento, Bienestar

En términos económicos, el Gobierno de Petro ha buscado no solo el crecimiento económico, sino también el bienestar social. Ha implementado políticas para reducir la desigualdad y mejorar las condiciones laborales, como el aumento del salario mínimo y la promoción de empleos formales. Aunque algunos afirman que esto “espantará a los inversionistas”, la realidad es que un país más equitativo es un país más estable y atractivo para las inversiones. Porque, seamos sinceros, ¿quién quiere invertir en un lugar donde solo unos pocos se benefician?

7. Desmontando Mitos: La Ultraderecha al Ataque

A lo largo de estos dos años, la ultraderecha no ha escatimado esfuerzos en pintar un panorama apocalíptico del Gobierno de Petro. Desde afirmar que “nos convertiremos en Venezuela” hasta sugerir que “estamos al borde del colapso”, la desinformación ha sido una constante. Sin embargo, los hechos hablan por sí mismos: Colombia no solo se ha mantenido estable, sino que ha progresado en áreas clave que antes eran solo promesas electorales. Claro, para algunos admitir que Petro ha hecho cosas buenas es como intentar encontrar una aguja en un pajar de prejuicios. Pero, al final del día, la realidad prevalece.

8. Un Gobierno del Cambio: ¿Miedo al Progreso?

Es comprensible que el cambio genere miedo e incertidumbre, especialmente en aquellos acostumbrados al “statu quo”. Sin embargo, el Gobierno de Petro ha demostrado que es posible avanzar hacia un país más justo y equitativo sin sacrificar la estabilidad. Ha sido un gobierno de cambio, sí, pero un cambio necesario y largamente esperado por millones de colombianos.

Para aquellos que prefieren el caos al progreso, quizás sea hora de replantearse qué es lo que temen realmente. Porque, en última instancia, el cambio no es el enemigo; la resistencia al cambio, sí.

Finalmente, más allá de la polarización, al cumplirse dos años del Gobierno de Petro, es evidente que ha habido logros significativos en diversos frentes. Aunque queda mucho por hacer y desafíos por superar, no podemos ignorar los avances logrados y la visión de un país más inclusivo y sostenible.

La oposición, especialmente la ultraderecha, seguirá atacando y buscando formas de desacreditar estos logros. Sin embargo, es fundamental que los ciudadanos se informen y analicen los hechos más allá de la retórica divisoria. Porque, al final del día, el objetivo de cualquier gobierno debe ser el bienestar de su gente, y Petro ha mostrado un compromiso genuino con esta meta.

Así que, mientras la ultraderecha sigue vendiendo teorías de conspiración y apocalipsis inminentes, nosotros podemos sonreír, sabiendo que el cambio, aunque desafiante, está conduciendo a Colombia hacia un futuro más brillante. ¡Y eso merece celebrarse! ¿Quién dijo que los cambios eran malos? Claro, probablemente alguien que nunca ha cambiado su peinado en 200 años. Mientras tanto, en estos dos años de Petro, hemos aprendido que la verdadera estabilidad viene de un cambio que beneficia a todos, no solo a unos pocos. Así que brindemos por más años de avances y menos años de prejuicios

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