Una investigación de La Silla Vacía ha puesto en evidencia irregularidades en el manejo de $105.000 millones destinados a la compra de laboratorios de robótica para colegios públicos en Colombia. De este monto, se detectaron sobrecostos por $10.000 millones en los contratos ejecutados por Computadores para Educar, entidad encargada de la adquisición.
El esquema, según el informe, operó a través de convenios suscritos por los gobiernos de Iván Duque y Gustavo Petro con dos cooperantes internacionales: la Organización de Estados Iberoamericanos (@ColombiaOEI) y el Centro Internacional de Responsabilidad Social y Sostenibilidad (@CISPalc). Estas organizaciones fungieron como intermediarias para canalizar los recursos.
El reporte señala que los laboratorios adquiridos presentan precios significativamente más altos que los del mercado, lo que ha generado cuestionamientos sobre la transparencia y eficiencia en la gestión de estos fondos.
Mientras tanto, entidades y expertos en control fiscal han solicitado explicaciones detalladas sobre el proceso de contratación y la justificación de los costos. Desde la administración actual, se ha anunciado una revisión exhaustiva de los convenios para determinar responsabilidades y prevenir futuros casos de corrupción.
Esta denuncia se suma a una serie de cuestionamientos recientes sobre el uso de recursos públicos destinados a la educación, un sector que exige mayor transparencia y rendición de cuentas.