El Gobierno Nacional está considerando asumir el déficit de 180 millones de dólares de la Federación Nacional de Cafeteros (Fedecafé), una medida que estaría sujeta a condiciones específicas para garantizar un manejo eficiente de los recursos. Este anuncio surge tras una serie de conversaciones para enfrentar la crisis financiera que afecta al gremio cafetero.
Entre las posibles condiciones planteadas por el Ejecutivo se encuentran mayores controles en la administración de Fedecafé y la implementación de estrategias para fortalecer la competitividad del sector. Aunque esta decisión busca evitar un impacto negativo en los pequeños caficultores, también abre el debate sobre la sostenibilidad financiera del gremio y el papel del Estado en este tipo de rescates.
Con la mirada puesta en la reactivación económica del sector, este respaldo gubernamental podría representar un alivio para los productores en momentos de incertidumbre. Sin embargo, los detalles finales de esta medida aún están en discusión.